Otras veces había visitado los castillos, ésta disfrutamos
también del recorrido entre ellos. Se trata de una ruta preciosa, muy variada y
bien señalizada, a tener en cuenta, haciéndola en más o menos días.
El inicio era en Montsegur, subíamos y bajábamos de nuevo al
párking desde donde salía el GR7B que seguiríamos durante todo el día en
algunas de sus variantes. Primero un
sendero precioso que nos anima después se convierte en pista asfaltada pero por
senderos que recorren los típicos pueblecitos franceses.
Entre asfalto y pista llegamos a Camp Redon, primer sitio
donde el GR no lo vemos claro así que decidimos continuar por carretera hasta
Le Peyrat. Saliendo de ese pueblo y después de un corto tramo de via verde hay
que ir por un sendero en subida camino de Mireval. Ya arriba, hacia el Lac
Montbel, que se cruza, literalmente por en medio.
La segunda parte, camino de Mirepoix, es más rápida y llana,
pasando por poblaciones más importantes como Camon y Lagarde. Vale la pena
dedicar unos minutos a Mirepoix, pequeña ciudad con una plaza central medieval
preciosa (y con abundantes sitios para comer o hacer un café.
Camino de Fanjeaux se nos hace de noche, pero lo cierto es
que el recorrido se hace bien. Ahí acaba el GR así que decidimos después de unos
70km ir en coche hasta Carcassone.
Primer día, relativamente rodador.
En cuanto al material Raidlight yo utilicé el ShortTrail Performer, ultra ligero y fresco y entre los dos llevamos el portabidón 1000
y la OLMO12 (en breve los reviews), ambos nos acompañarían los tres días.
Y para el recorrido, pedí por internet el siguiente mapa.
El segundo día se planteaba más duro, si bien los paisajes
entre viñedos prometían, las montañas a superar también. Partíamos de Monze
para evitar la salida de la ciudad, siempre engorrosas, y lo hacíamos con una
difícil subida pero peor bajada hacía el desconocido Castillo de Miramont,
sencillo pero interesante y con bonitas vistas. Ahí un “error” nos fué de
maravilla. Lo que en teoría era un recorrido en forma de L invertida ahora era
una variante en diagonal que pasaba por Montlaur. Esta variante se toma
llegando al castillo a la derecha por una pista, y la verdad es que no solo
vale la pena por su recorrido sinó porque sin darnos cuenta (aunque con un par
de despistes en la ruta) llegamos a Lagrasse.
Uno de los despistes es en uno de los puntos más altos del
recorrido, donde llega un GR de la derecha pero hay que seguir recto por el GR
también marcado. Por cierto el sábdo seguíamos el GR36.
Esta variante se ve en el enlace que cuelgo, pero no está
actalizado en el mapa.
En Lagrasse, donde una vez más nos dedicamos a hacer
turismo, también nos despistamos. Lo que nosotros consideramos como marcas
buenas, nos llevan a retroceder por el sendero que hubiesemos hecho en caso de
no coger la variante de Montlaur, sin darnos cuenta hacemos casi 3 kms en
sentido equivocado. El sendero correcto está justo en la entrada norte, al lado
del mapa que indica los caminos, al fijarnos se veía claro pero no lo
detectamos. Si se llevan muchos kms, de todas formas, recomendamos hacer un
tramo por una carretera que parte de la Abadía, ya sea por su derecha o por su
izquierda. Es una carretar muy secundaria, la D41, al final de la cual se gira
a la derecha y se baja por otra 1km hasta en un puente, empalmar de nuevo con
el GR36B camino de Sant Pierre Des Champs y posteriormente Villerouge Termenes.
Seguimos unos kms más hasta Maisons. Ahí de nuevo la única alternativa era
seguir por carretera hasta Cucugnan y la verdad es que después de disfrutar del
GR36 y sus subidas y bajadas, ya teníamos bastante (más de 70kms con algunos
extras debido a las pérdidas).
Una previsible llúvia nos permitía estrenar el topultralight, pero al final no llovió, así que tendremos que esperar a
ponerla a prueba más tarde.
Mapa
Y así llegamos al tercer día, sin duda el más espectacular.
Partimos del pie del Peyrepertuse, y el Quéribus a lo lejos. Salimos de Duilhac siguiendo unas trazas
naranjas y azules, colores muy medievales, aunque en seguida vemos un
cortafuegos que sube vertical y decidimos cogerlo. Buena elección.
Después de
un pequeño tramo de carretera, de nuevo un sendero nos lleva al párking,
pagamos nuestra entrada y para arriba. Justo en la entrada del espectacular
castillo vemos las marcas de un GR que sube por la otra vertiente. No escatimamos tiempo para el castillo, pero al
final bajamos. Decidimos hacerlo por la carretera siguiendo el GR, pero no vale
la pena, mejor por el cortafuegos. De nuevo en Duilhac seguimos nuestros
colores naranja y azul, que nos guiaran hasta el Quéribus pasando por Cucugnan.
La subida es espectacular, se pierde de vista el castillo y no lo volvemos a
ver hasta que un tramo llano nos lleva directamente a su pié. Ya solo nos quedan
unos pocos metros y gozar de este nuevo castillo viendo el Peyrepertuse.
Nuestro punto de partida.
Nuestro gran apoyo, Viqui, Bea y como no, Víctor, GRACIAS |
Como conclusión y aunque suene a tópico, agradecer a
Raidlight por colaborar en este fantástico proyecto, estamos muy contentos con
el resultado del material testeados. En breve y gracias a Zonafinisher iremos
colgando nuestras sinceras impresiones (Raidlight nos ha ayudado pero no nos
patrocina, así que lo que diremos es lo que realmente pensamos, explicando las
virtudes y los pocos aspectos a mejorar). El recorrido creo que vale la pena
hacerlo con un par de días más, para poder tener más tiempo libre y más pausa
para recorrerlo. Volveré seguro.
3 comentaris:
Gran proyecto!!! gran ruta!! a tener en cuenta a la hora de conocer y disfrutar, Genial
Pau & Cia.
Joako, a ver en verano, a mi me gustaría repetirla, eso sí con algun día de más o lo que es lo mismo (algun km de menos ;-) )
¡Qué pasada las fotos!
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